La coca valenciana es un clásico como aperitivo en las celebraciones y el tentempié perfecto para mediodía o, incluso, para un almuerzo rápido. ¿Todavía no conoces cuál es esta delicia? Hoy, desde la Regidoria de Comerç de València queremos acercarte un poquito más a nuestras cocas, las cocas saladas valencianas. ¡Seguro que si las pruebas, no podrás resistirte a ellas!
Historia de las cocas valencianas
Las cocas valencianas son tan tradicionales como lo es el arroz para la ciudad de València y son especiales para disfrutarlas durante toda la temporada. Es decir, durante todos el días del año.
Cuenta la leyenda que estas cocas eran una forma de aprovechar la masa de pan que no se había utilizado para elaborar las barras. En cambio, otras personas cuentan que este era el almuerzo por excelencia de los panaderos y las panaderas. Nosotros solo sabemos que no hay horno valenciano que no tenga cocas a su escaparate.
¡Te animamos a que les des un vistazo y verás como tenemos razón!
¿De qué está hecha la masa de las cocas valencianas?
Para quien no las conozca, las cocas valencianas saladas son primas hermanas de la pizza. A diferencia de las pizzas, las cocas son más pequeñas y se las hay de diferentes formas: alargadas, cuadradas o redondas. Normalmente, las cocas saladas se sirven de forma individual, aunque si las reservas en tu horno de confianza te las harán tan grandes como necesitas.
La base es una masa de levadura, aunque también se hace con cerveza. A menudo, se utiliza una parte de estos dos ingredientes, aceite de oliva, harina y sal.
Además, hay de diferentes sabores. Los de toda la vida y los de ahora. Las cocas más tradicionales son las de pisto, guisantes, espinacas, etc. Mientras que hay nuevas propuestas como las de sobrasada con miel o, incluso, las dulces, con crema de cacao.
¿Cuál crees que te gustará más? Pasa por nuestros mercados municipales y los hornos de la ciudad de València para salir de dudas. ¡Te encantarán!